Grupo de Práctica de Coherencia

La brecha en la planificación, implementación y reporte coherentes es especialmente profunda entre el nivel regional y nacional. Con frecuencia, la coherencia entre las agendas se promueve a nivel regional en términos del desarrollo de políticas y la puesta en funcionamiento de estas políticas en planes de acción. Sin embargo, a nivel nacional estos enfoques no necesariamente están disponibles para apoyar gobiernos nacionales en aprender de las experiencias disponibles y los mecanismos de planificación, implementación y reporte coherentes en otros países de la región.

Aún falta captar la completa magnitud de las complejidades y los requerimientos para traducir las agendas globales en procesos de planificación, implementación y reporte coherentes a nivel nacional y local. Se están llevando a cabo varias iniciativas para intentar de entender mejor qué se requiere y convertirlo en práctica, como en México y las Filipinas. Las prioridades serán diferentes de país en país, y se requerirán los esfuerzos concentrados de múltiples socios que trabajen estrechamente con los gobiernos para identificar las principales brechas y los tipos de apoyo que los actores nacionales y sub-nacionales requieren.

Un Grupo de Práctica de Coherencia que se basa en los esfuerzos existentes y da apoyo según demanda, es considerado una modalidad beneficiosa para la entrega de servicios y de intermediación de conocimiento para el beneficio de todos. Los países recibirán apoyo en la búsqueda de la información y la experticia correcta y serán acompañados durante la implementación de su propia solución a medida.

El GPC es establecido como un mecanismo a nivel regional para recolectar buenas prácticas y experiencias de países, apoyar y capacitar países según demanda, conectar socios, donantes y expertos afines y sistemáticamente alimentar las lecciones aprendidas y las buenas prácticas de vuelta al discurso regional e internacional.

Tiene como objetivo intensificar el intercambio regional entre la política y la práctica respecto de la coherencia en las agendas globales. Se han identificado los siguientes tres objetivos:

1. Las buenas prácticas y las experiencias maduras de los niveles nacionales y sub-nacionales son sistemáticamente documentadas e inyectadas en las discusiones y procesos regionales e internacionales.
2. Se entregan productos de conocimiento concreto, coaching y servicios de asesoría a los países seleccionados según demandas específicas y se promueve la cooperación de aprendizaje sur-sur.
3. Los socios que trabajan para la coherencia en la región son conectados; se facilita el enfoque de asociaciones a través de instituciones y el dialogo interinstitucional en diferentes niveles de gobierno y sectores.

Estos objetivos reconocen la importancia de los marcos institucionales y estructurales y la capacidad de un estado para actuar en forma eficaz, con el apoyo de sus socios nacionales e internacionales de desarrollo.

En Asia y el Pacífico, el GPC entrega apoyo a medida a los países en la región, de acuerdo a solicitudes específicas. Esta iniciativa tiene como objetivo promover un enfoque a través de instituciones y fomentar el diálogo a través de los niveles de gobierno y sectores, recurriendo a un amplio rango de instituciones nacionales y sub-nacionales, especialmente más allá de las agencias principales para las respectivas agendas. Por esta razón, se emprenderán esfuerzos para trabajar con representantes de los ministerios y departamentos responsables de la planificación, la elaboración del presupuesto y el financiamiento, y estadísticas y reporte.

El GPC es un grupo informal de practicantes afines de socios y expertos (“campeones”) internacionales de desarrollo dedicados a apoyar una mayor coherencia práctica en la implementación de las agendas globales a niveles nacionales y locales, y abogar activamente por un enfoque “suficientemente bueno” a la coherencia que puede asistir en beneficiar el apoyo internacional y nacional para implementar programas que contribuyan a los objetivos de desarrollo sostenible y las metas y prioridades establecidas por el Acuerdo de París y el Marco de Sendai para la Reducción del Riesgo de Desastres.

Como guardián de las principales agendas globales, la ONU se dedica a traducir los compromisos en acción y tienen varias iniciativas para apoyar a las entidades y gobiernos regionales en su empeño. La ONU es socio natural cuando se trata de entregar apoyo práctico a los países a través de los mecanismos regionales que convienen, como también la coordinación a nivel nacional y la visión y la respuesta colectiva a mediano plazo del sistema de la ONU consolidado en el Marco de Asistencia de las Naciones Unidas para el Desarrollo.

El GPC interactúa con socios tradicionales del programa de la IGGRD en la región, tales como ADPC y el Comité Consultivo Regional sobre la Gestión de Desastres, IFRC, UNESCAP, UNDRR y donantes bilaterales dedicados a fortalecer la resiliencia a desastres y la acción climática.
Para trabajar a través de los tres principales compromisos globales, se requiere con urgencia una colaboración más amplia entre los diversos actores, desde el sistema de la ONU y fuera de este. La IGGRD se ha asociado con la Red Global de Organizaciones de la Sociedad Civil para la Reducción de Desastres, la que representa la red internacional más grande de su especie.

El Grupo de Práctica de Coherencia da apoyo a medida a países según solicitudes específicas. Para más información entra aqui.